Dónde pocos pueden llegar

Cuando un sólo abrazo te lleva a donde nadie puede llegar... Que pasa en ti, cuando, un tienes más que hacer, y lo único que puede ayudarte a escapar, a soltar, lo que te ayuda a gritar, no es más que un abrazo. En mi vida, ha ocurrido dos veces, nunca había sentido esa sensación de gritar, pero no literalmente, sino a través de un simple abrazo, que es capaz de albergar todas tus ganas de desaparecer del mundo por sólo unos instantes, ese abrazo que por lo general son de los amigos, ayudan, por lo menos a mi me ha ocurrido, a escapar, auque sea por sólo unos segundos del mundo de mierda en que vivimos. Creo, y estoy convencido de que al mundo le hace falta humanidad, es un mundo de mierda, al cual a veces, o la gran mayoría del tiempo, somos parte de él. Insertos entre las apariencias y las banalidades, es por eso que a veces me da pena el darme cuenta de que somos parte y que integramos a ese mundo, me siento tonto e incapaz de romper con la cotidianeidad en el cuál estoy inmerso. El cometer errores es bueno, como dicen por ahí, sólo de errores se aprende, es verdad, sólo de ellos, se puede “madurar”? no lo sé si es la palabra correcta, pero de que sacas alguna lección , lo es! Este último tiempo, han pasado muchas cosas, de las cuales se puede aprender mucho, fueron difíciles de superar, pero se pudo, y creo que esta vez también lo podré lograr. Cuando ves que un tienes salida al error o en realidad al conflicto contigo mismo, ese abrazo proporcionado por la persona que está contigo es lo más sano y satisfactorio de ese momento, y el escuchar , estoy contigo, libera todo lo guardado y expresar lo inexpresado, creo que es una de las cosas que más produce satisfacción después de haberlo hecho. Gracias, a toda la gente que ha estado conmigo en los momentos difíciles, te quiero!